
Dicen que el dolor de una ruptura es similar al del fallecimiento de alguien, y en muchos casos, así es. Es una pérdida y necesita de una reestructuración mental a “la vida después de…”, y esto lleva su proceso y su tiempo. Sin embargo, somos muy capaces de adaptarnos y volver a florecer. Aquí es dónde una terapia psicológica para superar una separación puede serte de gran ayuda.
DIFICULTADES POST-RUPTURA
Algunas dificultades con las que te puedes encontrar ante una ruptura pueden ser: sentimientos de soledad, tristeza, dificultad para seguir con tu vida, ansiedad, insomnio, irritabilidad, ataques de ira…entre otros. Si ves que estos síntomas entorpecen tu vida en lo personal, social o profesional, puede ser un buen momento para buscar ayuda profesional.
RELACIÓN CON LA INFANCIA
Las relaciones de pareja son el resultado de lo que aprendimos de las relaciones en nuestras primeras experiencias con nuestros cuidadores. De ahí sacamos toda la información acerca de qué esperar, si eran seguras o peligrosas, si eran placenteras o dolorosas, si había presencia y sintonía o no…etc.
Toda esa información que recabamos, la volcamos ahora en el presente para que nos guíe y ayude a transitar las relaciones adultas. Puedes hacerte una idea ya de que mucha de esa información está desactualizada o nos entorpece más que ayuda. De ahí la importancia de revisar todos esos patrones de vinculación, para sanar nuestras heridas y poder construir ahora el tipo de relación que queremos para nosotros.
No importa si quieres una terapia psicológica para superar una separación, salvarla, o para salvarte a ti mismo, invertir en uno mismo siempre es positivo.